martes, abril 29, 2008

No me he ido

Sigo sentada en el sillón, no me he movido desde que diste el portazo y te fuiste. Creo que alcancé a oír un “no me esperes para comer”. O tal vez lo inventé.

Me quedé con varias preguntas y unas cuantas respuestas a esas preguntas que formulaste antes de salir. Respuestas inútiles pues tu cuestionamiento era retórico. Preguntas innecesarias, trato de racionalizar algo que quizás no tenga explicación.

Alguna vez me contaron de una pareja que rescató un niño de la calle. El niño tenía unos 12 años y era algo rebelde, cuando se ponía impertinente su nuevo papá lo abrazaba en lugar de regañarlo. No sé por qué solo pienso en esa imagen. Tal vez eso debí hacer: abrazarte y no soltarte, no dejar que te fueras aunque patalearas.

Sé que tu reacción no tiene que ver conmigo. Y sin embargo quisiera saber qué decir para aliviar tu malestar, qué hacer para ayudarte a encontrar tus respuestas.

Obscurece y sigo en el mismo sillón, abrazo inútilmente un cojín cuando sé que debería estarte abrazando a ti, que no siempre te dejas.

13 comentarios:

Jesús Mtz dijo...

Me gusto mucho como lo escribes, pero una cosa, acaso es como para una persona quien se alejo de tu vida???

Mond dijo...

Abrazarlo en vez de regañarlo... hablar en vez de pelear, ¿sentir en vez de pensar?... No sé, me dejas pensando... gracias.

Pillo dijo...

mmmmm, no todos quieren ser abrazados y a veces está bien que se vayan, yo no creo que la vida se equivoca,´siento que nadie se va si no tiene que irse, así como que nadie que no se deba quedar se queda, uno a veces suelta muchos pajaros y los ve volar, no siempre se quiere soltarlos, tal vez sean de esas misiones pequeñas que tenemos, pequeñas y grandes a la vez....

en fin, abrazame a mi que ya me voy y te voy a extrañar...

Gustavo Camacho dijo...

Recojo guantes, aunque siempre he sido manco.
Te has inventado un portazo y una espera.
Algunas veces los planetas no se alinean y por esto no se forman o se pertenece a otros universos. Ya saldrá un sol en mi galaxia y quizás la sombra de mis sobras sean redibujadzas antes del atardecer.

Eleafar Cananita dijo...

pues si nos tenemos que poner simbolicos: lo importante es la puerta.

Anónimo dijo...

Pues ya muévase, linda :)

NuNu dijo...

Que bello ese abrazo....Aunque se quede en el aire.....¿El regaño? siempre hará falta.....

Seguro el perfume en tu cuello será extrañado tambien por la otra parte......Nunca lo dudes.....


P.D. Me gustan los abrazos arrepentidos....


Un beso a esa nostalgía....

Anónimo dijo...

quién se fue?
si alguien se va, existe la posibilidad de que pueda regresar : )

Irene dijo...

Cuanto sentimiento hay...
Regresará y podras abrazarle de nuevo.

Karen dijo...

¡Qué horrible es quedarse con las respuestas atoradas!

Anónimo dijo...

¿Por qué demonios todos tienen que suponer que cada post, cuento, historia o lo que sea que se publica en un blog se trata de algo autobiográfico, que la escena sucedió tal como se describe y la puerta, la sensación y la imagen poética? Si todo lo que se escribiera fuera cierto o pretendiera serlo, ¿de qué serviría escribir? ¿qué diversión tendría? ¿qué juego habría entre el autor y el lector?

dijo...

válgame! argüello regreso al ruedo... bienvenido darling.

Me gusta la sensación de la puerta que se cierra, del abrazo que se queda en el aire...del aroma que será recordado.

Miguel-Iván Barradas dijo...

Siempre que leo tu blog me embarco en una serie de interrogantes personales que terminan deconstruyendo un soliloquio.

Gracias por aportar tantas imágenes y detallarlas de manera que fácilmente sea compartida por personas como yo, y como miles, en este mundo. Gracias por el viento tramontana.

Un abrazo!