jueves, diciembre 08, 2005

Y si llegas

a mi vida y yo no estoy, toca quedito a lo mejor me animo a salir. Los sonidos tenues, como las palabras suaves, siempre son más incitantes. O tal vez tengas que aguardar a mi regreso, si eso quieres.

Yo he estado aquí, creyendo que mi estancia es transitoria, que el tiempo me forzaría a salir, pero el tiempo nunca arregla nada. Hay días que quiero escapar, no sé a dónde ni para qué. Escapar es igual que quedarme: siempre estoy conmigo.

Hay días que el viento intenta llevarme y me resisto. Digo que no tengo tiempo, que tengo que resolver asuntos importantes. Me crea incertidumbre el moverme: qué tal que no resulta, qué tal que nada es cierto. Aquí me voy fabricando una rutina, en la que a veces me siento aprisionada y otras me siento redimida. Conozco los caminos: la mayoría los cruzo diario, otros los descifro, aunque algunos con dificultad. Igual, todos me son familiares, coherentes, algunos indispensables. A veces la certeza puede crear libertad.

La verdad es que me da miedo tanto irme como quedarme. Tal vez esté cuando llegues, si no respondo toca un poco más fuerte. Si insistes trataré de salir a encontrarte.

4 comentarios:

Michelle On The Road dijo...

mmmm. Interesante disertación sobre la estancia con una misma. El miedo a salir que es igual al miedo a quedarse dentro. ¿Para qué salir? si afuera es tan hostil y cómo no quedarse dentro si es tan cómodo regodearse en el dolor.
Me gusta, sí, hasta pensé en una canción.
Besos
M

Silmariat, "El Antiguo Hechicero" dijo...

Amiga:

Lo que no cambia, muere.

Mi abuela, la Filósofa, me dijo una vez: “No te arrepientas de lo que hiciste, arrepiente y mucho de lo que NO hiciste”

Viva amiga y así, egoísta yo, podré disfrutar de su pluma.

Un beso -qué fresco y confianzudo estoy, no?-.

Todo lo mejor para Usted.

Anónimo dijo...

Digo yo, que en realidad no es decir nada importante, que una no debe salir hasta que el cuerpo y el alma la dejen a una hacerlo, hay que escucharse, si titubeas es que algo huele raro.

Un besito.

Anónimo dijo...

Sea lo que sea, hazme un favor: por lo que más quieras, no te apartes de tí misma.

Besos