Hay sábados en que no tengo ganas de nada. Camino por el día despacio, sin energía, y hago lo menos posible. No voy a la tintorería, ni al súper. Tampoco voy al sastre ni al relojero a recoger los aretes que dejé arreglando.
El día transcurre despacio, pero no tanto como quisiera. Me gustaría sentarme a ver pasar los minutos y contar los segundos: alargar el sábado. Siento que necesito tiempo para componerme y reacomodar mi corazón. No me siento especialmente triste pero tampoco contenta. A veces creo que estos días evito sentir para no correr el riesgo de caer en una tristeza irremediable. Tal vez por eso no hago mucho, para no sentir, aunque el costo sea el no vivir demasiado el día.
Y llega la noche y quisiera detener el sábado, no quiero que se acabe, no quiero pasar otro día sin hacer algo significativo, pero no logro detener el tiempo. El tiempo que se empeña en decirnos que él maneja nuestros días y nuestras horas, por lo menos en esa dimensión suya de tiempo. El tiempo que marca los cambios de estación y deja trazos en el cuerpo y en la cara. Trazos que no reconocemos al vernos en el espejo, pero que acabamos viendo por comparación con fotos viejas.
No quiero que termine el sábado. Quisiera que me diera tiempo de ver por lo menos 10 películas y leer 5 libros. De escribir una novela, de hacer borradores de tres o cuatro cuentos, de hacer una comida completa y sentarme en la terraza a ver las estrellas. Quisiera que la noche no llegara, no todavía, no la de este sábado.
O tal vez lo que quiero es vivir una vida de sábados infinitos.
sábado, octubre 22, 2005
Tonterías de sábado
Publicadas por Tramontana a la/s 21:22
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7 comentarios:
El tiempo es inexorable y no se detiene por nada...lo importante (al menos para mí) es que las cosas significativas oscilan desde "leer 5 libros" hasta regalarle una sonrisa al vecino o estrecharle la mano al mendigo de la calle....sintoniza esta onda y NINGÜN día te pasará "liso"
A quién no le pasa lo mismo?
El tiempo se nos escurre por las paredes..., y cuando menos esperamos, se nos va o se nos queda metido en algún lugar de nuestros ojos o en las arrugas de nuestra piel.
Dominarlo? Es de tontos.
Todo lo mejor para Usted.
bueno pue sya es lunes pero con un polvo especial de fiabas jajjaja haremos que es sábado todavía, le parece?
mmm no, no es de esos polvos ehh.. aunque bueno con ese hasta mi jefe se convence que lo es :P
buena semana tramontana..
Cloé.
...la eterna historia de los fines de semana, creo que mucha/os andamos con la crisis de la edad adulta. Lo cierto es que parece ser que siempre necesitamos "quien nos quite el tiempo" cierto? Recuerdo que mi maestro Sergio Bustamante nos decía, hace ya 20 años en la clase de teatro en la bella colonia Condesa, que cuando nos invadiera la tristeza lo mejor era entrar a la ducha, poner música muy fuerte y gritar a todo pulmón o bien pelear con alguien hasta sentir la adrenalina del sobresalto - lo cual significaría vida, estar vivos! Te mando un abrazo de oso!!!
Mira que curioso, yo hay lunes que no tengo ganas de nada, y martes que no tengo ganas de nada.
te he linkeado..
perrito.. aquí estamos vale??
ya escribe, te esperamos....
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