Comí langosta asada. Pensé en las veces que comimos juntos. Muchas langostas. Otra vida. Recuerdo tu sonrisa, tu voz, nuestra plática interminable. O eso parecía hasta que un día se terminaron las palabras.Hoy te extrañé. Es como si hubieramos cenado juntos. Es como si nunca hubieramos existido.
viernes, enero 19, 2007
Hoy te extrañé
Publicadas por Tramontana a la/s 21:17
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6 comentarios:
ups... me tocó de primero...
Me pregunto:
- ¿Algún círculo sin cerrar?
- ojalá que no altere tu paz interior ni empañe tu felicidad.
Un abrazo
Que rica la langosta asada. Que rico recordar aunque sea para cerrar círculos.
Un abrazo.
Así pasa, se extraña cuando menos lo pensamos... sólo lo sentimos.
la piel, los lugares, los momentos, los buenos vinos y las viejas frases tienen su memoria particular. A veces hacen conexión y nos desbordan.
Si te sirve de exorcismo, tu sis Blue nunca ha comido langosta :)
Extrañar es parte de la naturaleza del ser humano que sabe amar. Extrañar pueder ser tan fuerte y puede durar tanto como el amor, qué se puede hacer? Hay quienes se pierden en el amor y quienes se pierden del amor...qué cada quien decida....Tú ya lo haz hecho. Besos siempre
langostas!
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