Viajar. Siempre me crea una expectativa-emoción-inquietud. La noche anterior duermo mal, entre la preocupación de empacar todo lo necesario y la anticipación de llegar a otro lugar.
Esta vez voy a un país totalmente nuevo y supongo que diferente a lo que conozco: Brasil. No espero nada semejante a lo que he visto de Sudamérica que sólo es algo de Uruguay y Buenos Aires.
Pienso en lo inmenso del país y trato de imaginarme ahí, oyendo este idioma que parece que cantan. Del que entiendo algunas partes y adivino otras.
Mañana pasearé por Sao Paolo, una ciudad con sus calles y sus gentes, sus olores y su luz. Buscaré su identidad o más que buscarla esperaré a que se descubra sola, como hacen las grandes ciudades acostumbradas a ser vistas por tantos turistas curiosos, hombres de negocios indiferentes y algunos viajeros.
Son ciudades que se muestran para quienes quieren ver y que se esconden para quienes no lo quieren. Cada lugar tiene su belleza como cada persona (o casi todas), aunque no siempre sabemos verla o disfrutarla. Cada lugar tiene su individualidad.
Me han dicho que Sao Paolo es feo, y yo me espero una ciudad diferente y linda: será mi primer contacto con Brasil.
viernes, junio 02, 2006
Viajar
Publicadas por Tramontana a la/s 08:56
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7 comentarios:
Disfruta muchísimo..... trae fotos.
Cuando regreses, a ver si ahora sí nos miramos a los ojos.
Un beso!
Pásala de lujo!
Buen viaje!!! Igual podrías darte una vueltita por MVD, ¿no?
Viajar es maravilloso. Me pasa lo mismo, la noche anterior no duermo y me pongo muy nerviosa. Me gusta conocer nuevas ciudades caminando, me maravilla pisar los suelos que otros han pisado miles de veces durante cientos de años. Me gusta ver y tocar todo para confirmar que es de verdad, me gusta imaginar lo que piensan y hacen las personas que viven en esos nuevos lugares a donde voy, es toda una fantasía. Ya nos contarás y compartirás fotografías. Qué delirio! Un beso. lutz
Si vivir dia a dia se puede convertir en un viaje maravilloso, el tomar un avion e ir a lugares desconocidos para convertirlos en parte de uno es, como dice Lutz, fantastico! Disfruta cada momento, bueno o malo, guardalo en tu baul de los recuerdos y comparte lo que se pueda compartir.
Me alegro por tí; yo digo, que no deberíamos tener fronteras, ni físicas ni mentales. Deberíamos sentirnos nacionales en el planeta tierra... Cualquier día, cualquier amanecer, cualquier fin de semana, levantarnos de la cama y decir: hoy, voy a ir a Portugal, Brasil, Suiza, Australia... como quien dice, hoy voy a ir a la tienda de la esquina...
Disfruta tu salida.
Besos.
PD. no te olvides de un souvenir. jeje!!
Y las fotos????
Debe estar muy cansada nuestra amiga Tramontana. OK, te damos unos días para que compartas. Beso
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